Blogia
La aventura

¿QUÉ HE APRENDIDO?

¿QUÉ HE APRENDIDO?

Con  esta pregunta que me planteo quiero hacer uso de la metacognición, empleando ésta como la conciencia del proceso de pensamiento debiendo descubrir el concepto a través de actividades en clase y de las discusiones que se han realizado en el foro ante las distintas propuestas planteadas para su resolución mediante la metacognición.

Metacognición es un término que se usa para designar a una serie de operaciones, actividades y funciones cognoscitivas llevadas a cabo por una persona, mediante un conjunto interiorizado de mecanismos intelectuales que le permiten recabar, producir y evaluar información, a la vez que hace posible que dicha persona pueda conocer, controlar y autorregular su propio funcionamiento intelectual.

Los trabajos de Flawel y los que abordaban los problemas implicados por la generalización y transferencia de lo aprendido sirvieron para confirmar que el ser humano es capaz de someter a estudio y análisis los procesos que él mismo usa para conocer, aprender y resolver problemas, es decir, puede tener conocimiento sobre sus propios procesos cognitivos y, además, controlar y regular el uso de estos procesos.

Para García y La Casa la metacognición tiene que ver con el conocimiento que una persona tiene de las características y limitaciones de sus propios recursos cognitivos, y con el control y la regulación que ella puede ejercer sobre tales recursos. También, concebir el aprender como un proceso de solucionar problemas posibilita un abordaje metacognoscitivo del aprendizaje, ya que este último podría ser estudiado desde la perspectiva del propio sujeto que aprende, quien es capaz de observar sus propios procesos cognitivos y de reflexionar sobre ellos (García y La Casa, 1990)

Pozo  plantea, “si una persona tiene conocimiento de sus procesos psicológicos propios, podrá usarlos más eficaz y flexiblemente en la planificación de sus estrategias de aprendizaje, es decir, las secuencias de procedimientos y actividades cognitivas que se integran  con el propósito de facilitar la adquisición, almacenamiento y/o utilización de la información”. También dice “las teorías psicológicas del aprendizaje se orientan cada vez más al análisis de la interacción entre la información que se ha de aprender y los procesos psicológicos mediante los cuales dicha información es procesada por el sujeto” (Pozo, 1990, 201)

 

Considero esta autoevaluación como parte del proceso de internalización de mis prácticas realizadas durante el curso tanto con la realización de las lecturas propuestas por la profesora, así como su posterior presentación en clase por parte de los alumnos que realizaban la exposición. Todo ello me ha servido para aclarar algunos puntos de vista desde los debates surgidos en clase y a través del foro, al mismo tiempo que poder unir la teoría con la práctica a la hora de realizar las reflexiones en la Wct, para ello en la mayoría de los casos, yo he necesitado volver a leer los textos y buscar información para aclarar algunos detalles que en clase no me había quedado claros.

Como fruto de todo este trabajo se ha producido el cambio en algunas de mis creencias y supuestos después de las lecturas realizadas e introducir algunos conceptos nuevos en el análisis de los textos: su nivel técnico, los elementos más sobresalientes... He usado estrategias para la comprensión tales como volver a leer los textos para clarificar la información confusa, usar otros recursos de la bibliografía, Internet... La lectura de los distintos blogs me han servido como transferencias de las distintas estrategias utilizadas por las compañeros/as de la clase. complementándolas con otras estrategias que mejoran la comprensión conceptual: el subrayado, toma de  apuntes, escribir resúmenes, formulación de interrogantes sobre los distintos textos propuestos por la profesora. Todo este proceso ha necesitado  de un andamiaje.

Una vez dominadas las estrategias anteriores, entramos en la fase propia de autoevaluación. El modelo de enseñanza recíproca me ha permitido como alumna observar mi proceso de autoevaluación y paulatinamente asimilar dicho proceso dentro de mi propio esquema cognitivo. Para que este proceso se realizara la profesora eligió los textos sobre los que todos los alumnos debíamos trabajar realizando una primera lectura y de cada uno de ellos realizar una presentación por cada grupo de alumnos.

Lo que he experimentado y desarrollado con la preparación del texto realizado por mi grupo ha sido comprender los procesos de adquisición de habilidades relacionadas con la alfabetización en la escuela y fuera de ella, al igual que las habilidades sociales necesarias para la realización del trabajo cooperativo.

Pozo (2003) propone el conocer como parte de la cultura que, al mismo tiempo, emerge del aprendizaje, y viceversa, donde conocimiento y aprendizaje son dos procesos o sistemas que se constituyen mutuamente; el conocimiento sería un proceso de redescripción representacional (Pozo, 2003, Karmiloff-Smith, 1994 ) que va emergiendo en una complejidad creciente, requiriendo niveles más simples para avanzar y desarrollarse en el tiempo. Por otro lado, el aprendizaje se manifiesta como un proceso de cambio cognitivo de las representaciones anteriores, donde éstas se van modificando y transformando en la medida que se van explicitando o “encarnando” como conocimiento propiamente tal de la cultura a la cual se pertenece.

Sin embargo, no todo el conocimiento es consciente o genera procesos reflexivos. Según Pozo (2003), cuando un conocimiento se hace explícito, genera un tipo de conocimiento declarativo que produce la adquisición de hechos y sucesos que  se definen en el contexto cultural al cual pertenecemos y nos posibilita generar aprendizajes significativos que se pueden transferir de manera adecuada. Por lo tanto, cuando un conocimiento procedimental  se transforma en un proceso reflexivo y consciente, y se autorregula su uso y la forma en que se utiliza, se está generando principalmente, un conocimiento estratégico Monereo y Castelló, 1997); Pozo y Monereo, 2001), el cual implica principalmente el uso de la metacognición en la regulación de dichos procesos de conocimiento y aprendizaje.

En este sentido, creo que en el desarrollo y aplicación de la metacognición, cabe mencionar que es importante conocerla y autorregularla, ser consciente del propio proceso de aprendizaje y al mismo tiempo, de adquisición del conocimiento que uno es capaz de generar, queriendo decir con esto que en la medida que el pensamiento metacognitivo se transforme a la vez en una estrategia de autoaprendizaje y autorregulación (Pozo, Monereo, 2001), que los procesos de redescripción de las representaciones mentales que generemos vayan formando la sociedad del conocimiento

Resumiendo, me gustaría concluir que la aplicación de las estrategias de aprendizaje que he usado a lo largo de la asignatura me ha ayudado como profesional de la enseñanza y como futura orientadora en mi tarea de aprender a aprender (metacognición) y a superar las rupturas epistemológicas (constructivismo).

Como resultado de la utilización de las diferentes estrategias, he potenciado sus ventajas, resultando las herramientas metacognitivas fieles mecanismos de autoevaluación para mí como alumna; he progresado en el enriquecimiento de mi autonomía y eficiencia en el proceso de construcción de conocimiento, siendo capaz de detectar los cambios que han tenido lugar en mi estructura cognitiva en un periodo de tiempo, cuantificar los resultados del avance de mis aprendizajes y aspirar al logro de aprendizajes significativos que han contribuido a mejorar mi autoestima, al sentirme dueña de mis propios conocimientos y darme cuenta que se debe desistir del aprendizaje mecánico.

 

 

 

0 comentarios